lunes, 28 de septiembre de 2015

Reglas de circulación para ciclistas

El tránsito
El tránsito es un fenómeno sociológico en el que nos vemos involucrados todos. Con solo salir a la calle nos encontramos con esta realidad. La inseguridad vial conlleva un problema de derechos, porque vivir, gozar de la salud y de la integridad física y psíquica, transitar libremente, movilizarse, permanecer en el espacio público y participar de todos los eventos sociales y culturales que se desarrollen en ese ámbito son derechos fundamentales reconocidos en el ordenamiento nacional y en los sistemas jurídicos provinciales. 
Si prestamos atención a las noticias que publican los medios de comunicación nos daremos cuenta de la dimensión del flagelo de inseguridad vial y los daños ello acarrea a cualquier ciudadano, ya sea como peatón, como usuario de transporte público o privado o como un simple usuario de la vía pública, sin importar las edades.
Niños, jóvenes y adultos debemos estar preparados para cuidar nuestra propia vida. Es necesario comenzar esta preparación desde pequeños, en la familia, la escuela y la sociedad en general.
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE SEGURIDAD VIAL
Principio de la responsabilidad
 Todos los usuarios de la vía pública deben asumir la responsabilidad de cumplir la normativa existente, evitando ser un peligro o un obstáculo para los demás usuarios, adoptando un comportamiento adecuado en cada momento y asumiendo las consecuencias de sus actos. Aunque todos los principios que vamos a tratar son importantes, este lo es posiblemente más, ya que si no somos conscientes de la responsabilidad que asumimos cuando usamos las vías públicas y efectivamente las asumimos, la circulación sería un caos y supondría un gran peligro para todos. 
Principio de confianza en la normalidad del tránsito
Todos los usuarios de la vía pública que se comporten siguiendo el principio de responsabilidad y por lo tanto cumplan las normas de tránsito, tiene el derecho de esperar que los demás usuarios también las cumplan y por lo tanto hagan uso adecuado de ellas. Por lo tanto este principio nos diría “ten confianza que, en general todos van a cumplir lo establecido”.
Principio de la seguridad o de defensa
En determinada circunstancia, el principio de seguridad o de la defensa, se antepone al de confianza. Nadie debe confiar ilimitadamente en que los demás usuarios cumplan al pie de la letra las normas reglamentarias, en casos excepcionales, algún usuario puede tener un inesperado cambio de actitud y tener un comportamiento contrario a la norma. Este principio, por la tanto, nos obliga prever un comportamiento contrario a las normas de circulación para evitar daños a circular por las vías públicas defensivamente es decir contando con la eventual imprudencia de los demás partícipes en el tránsito.
Este principio es por lo tanto el complemento del “de confianza” y de él se deriva una de las normas esenciales de la circulación, la prudencia.
Principio de conducción dirigida
Este principio nos  dice que los conductores deben ser dueños del movimiento de su vehículo en todo momento nos obliga pues, a concentrar toda nuestra atención y nuestra conciencia a la actividad de conducir, sin distracciones que nos haga perder el dominio sobre nuestro vehículo y por lo tanto provocar daños a los demás usuarios.
Principio de señalización 
La norma general de circulación indica que se debe circular por la derecha. Este principio dice que si existe un obstáculo que impida el paso o altere o limite esta regla, debe estar convenientemente señalizado.
Como se ve este principio es complementario al de confianza ya que si no existe ninguna señal que indique alguna alteración de la normal circulación el conductor circulará con la confianza de que no hay ningún obstáculo y si hubiera, estaría señalizado.
LA BICICLETA 
La edad mínima para circular en bicicleta por calles o avenidas es de de 12 (doce) años. Para la circulación de bicicletas en la vía pública, se prohíbe:
* Transportar a otra persona.
* Soltar las manos del manubrio, salvo que sea necesario para realizar alguna señal.
* Tomarse de otros vehículos para ser remolcados.
* Acercarse o “chuparse” a otro vehículo que circula adelante.
* Circular por las veredas.
* Circular zigzagueando entre los vehículos.
* Circular escuchando “walkman”, radio o con auriculares reproductores de sonido que nos aíslen de las circunstancias del tránsito (bocinas, sirenas de vehículos en emergencia, etc.).
* Cargar la bicicleta con objetos que dificulten el manejo o reduzcan la visión.
Se aconseja equiparse con los siguientes elementos:
• Colocarse el casco. 
• Espejos retrovisores en ambos lados, siendo fundamental la colocación del espejo izquierdo.
• Sistema de alumbrado en perfectas condiciones de limpieza. Luz blanca delantera, luz roja trasera.
• Bandas reflectoras en: Casco, discos de ruedas, sobre el cuadro, en brazaletes, etc.
• Uso de ropa con vivos reflectoras en horas nocturnas.
• Si viaja en motocicleta, mire por los retrovisores frecuentemente, para darse cuenta del tránsito que viene detrás y facilitar una maniobra de emergencia.
• Evite dar vueltas cerradas en las esquinas.
• Evite pasar cerca de grupos de personas y más si no son de aspecto confiable.
• Antes de salir de noche, verifique los reflectores nocturnos o luces.
• Evite viajar en este tipo de vehículos de noche o cuando amenace lluvia.


REGLAS DE CIRCULACIÓN PARA CICLISTAS
Considerando la natural debilidad del conductor de bicicleta que circula por las calles y avenidas de intenso tránsito, como conductores deberemos observar determinadas “reglas” o “normas” para una correcta circulación en la Vía pública.
Cuando varios ciclistas circulen en grupos, deberán hacerlo por la derecha y en “fila india” (uno detrás del otro) De esta forma, ocupan un menor espacio en la calzada evitando estar tan expuestos a los riesgos del tránsito
Circular por la Derecha, regla fundamental, debe ser respetada por todo ciclista urbano quien debe circular en línea recta, lo más cerca posible de la vereda y sin hacer cambios bruscos de dirección.
Si se transporta en bicicleta en rutas o zonas de alto tránsito o velocidad, circule por la banquina en sentido contrario al tránsito, a fin de que vea quien viene frente a usted y evitar choques por la parte posterior, ponga especial cuidado en las intersecciones.. Evite pasar cerca de grupos de personas y más si no son de aspecto confiable.
Precauciones:
• Situarnos atrás del vehículo que se pretende adelantar, a su izquierda y a distancia prudencial.
• Para adelantarnos a otro vehículo, debemos estar muy seguros de que no correremos peligro con la maniobra. En circunstancias dudosas, siempre es aconsejable esperar. Nunca confiarnos en la destreza de los otros conductores.
• Mirar hacia atrás y hacia adelante para comprobar que ningún vehículo quiera a su vez intentar un adelantamiento (ni los que nos preceden, ni el que queremos superar).
• Advertir con anticipación la maniobra, extendiendo el brazo izquierdo a la altura del hombro.
• Pedalear con rapidez para que el adelantamiento dure lo menos posible.
• Volver a colocarnos a la derecha de la calzada, sin obstaculizar al vehículo que hemos pasado. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario